La sexta etapa de la Deporvillage Transpyr Coast to Coast entra en el Pirineo de Girona y se acerca a la Costa Brava a una solo etapa de finalizar la doceava edición de la Deporvillage Transpyr Coast to Coast, el paso por la Cerdaña y la llegada al Ripollès se ha convertido en un nuevo reto marcado por subidas exigentes, divertidas bajadas y un cambio progresivo del paisaje.

Con menos calor que en la etapa anterior, la mayor dificultad para los ciclistas de montaña se ha encontrado en el largo ascenso al Collado de la Creu de Maians, rozando los 2000 metros de altitud, y el muro final en la zona de la Collada Verda. Por otro lado, el descenso desde Dórria ha sido una combinación de buenos caminos y bonitos senderos, a ratos dentro del bosque, a ratos entre prados que ha hecho la delicia del pelotón internacional. El tramo cronometrado ha vuelto a dar la victoria a Ismael Ventura y Guillem Cassú del Fox Factory Team en modalidad masculina, y a los equipos italianos de Simone Scarella y Stefano Fratta en categoría Máster y Roland Ploner y Andrea Vecchiato Super Máster.

En la modalidad de ciclismo de carretera, la estrella del día ha sido la collada de Toses y un recorrido puramente Backroads por el puerto de Jou, que ha permitido entrar en una de las zonas menos conocidas por los amantes de las ruedas finas.

Terminada la etapa, los participantes que empezaron el domingo en el Cantábrico se encuentran a menos de 24 horas de cumplir el sueño de cruzar los Pirineos en tan solo 7 días con la localidad de Roses a una sola etapa. Antes, todavía deberán realizar más de 100 kilómetros y casi 3000 metros de desnivel.